OPINION: PRM, desafíos en el mediano y corto plazo.

POR JOSE VALENTIN PEREZ

 “Las elecciones acaban de recién concluir y  se debe tomar un receso” no comparto esta opinión de muchos. Al contrario el Partido Revolucionario Moderno debe iniciar una reingeniería profunda en todos sus estamentos, auto examinarse, reformular sus metas y objetivos. Es urgente un análisis introspectivo que genere transformaciones reales en toda la estructura.

Es tiempo de  planificar los pasos a seguir, dar más espacios a la juventud, educarles e inculcarles nuevos valores. En medio de esta convulsión social es necesario que el PRM habilite escuelas de formación política para cada provincia, es el método más idóneo  para recuperar nuestra juventud y desintoxicar sus cerebros del modelo burdo y perverso de hacer política que se ha querido instaurar en la república dominicana las últimas dos décadas.

Enfrentados a  protagonistas borrachos de poder, dispuesto a ser lo que fuere con tal de conservar posiciones;  aquello que Alain Minc,  llamó, “la borrachera democrática” impulsada por el Estado-Providencia, que trastoca el desarrollo social y material de un país, fundamentando su accionar en un esquema de percepción, que hace del poder político un instrumento  de realización personal y grupal, lanzado hacia una participación abierta, sin distinción, ni rigor, ni exigencias de conductas electorales. 

Las herejías ya no tienen sentido, cuando una sociedad valora el sentimiento subjetivo de  sus actores y desvaloriza el carácter objetivo de la acción pone en marcha un proceso de  desubstancialización de las acciones y doctrinas cuyo efecto inmediato es un relajamiento ideológico y político  y esto es  justamente lo que está pasando en nuestro país.

Crear arraigo social debe ser un SOS para el Partido Moderno. 

 Luis y Carolina deben decretar como norma obligatoria que  no se inicia una reunión en la organización por pequeña que fuere si antes no se entonan las letras del himno del partido; ese sentimiento hay que comenzar a cultivarlo…….. No hay tiempo para descansar. Si en el mediano y corto plazo no se cumple con estos desafíos el Partido Revolucionario Moderno tendrá un futuro incierto. Es momento de  hacer  oposición seria,  basada en propuestas reales que contribuyan al fortalecimiento institucional del país,  embestir el cáncer de raíz, no desperdiciar energía en nimiedades, fustigar el sistema como un todo, no al sujeto de manera independiente.

El PRM  debe enfilar sus cañones en educar los jóvenes con  edades que oscilen entre catorce y quince años, ellos serán un segmento importante de la población  para el dos mil veinte. Muchos dicen  que de aprobarse  la ley de partidos la misma regirá  el funcionamiento  interno de las organizaciones políticas, es cierto, más no  así la conducta individual de la militancia dentro de las organizaciones. Solo la formación socio-política y el seguimiento continuo a  sus gentes augurarán  éxitos al PRM. Es un compromiso de Luis y Carolina.

El tiempo dirá.