tomado de la lupa del sur;Barahona.- El doctor Octavio Féliz Vidal, médico terapeuta familiar, ve un asunto urgente desmontar el machismo de la sociedad dominicana que está provocando la muerte de unas 100 mujeres cada año.
Consideró que el “ego machista dominicano” mata en promedio 100 mujeres cada año, sin que, a su juicio, haya reacción de la comunidad nacional ni de las autoridades competentes, mientras el problema social sigue adelante.
¿Qué valor le damos a la vida de una mujer dominicana?, se preguntó el también profesor de la Universidad Autónomo de Santo Domingo (UASD) y señaló “aquí se matan 40 mujeres más que las personas que mató Stephen Paddock en Las Vegas al dispararle a una multitud que participaba en un concierto libre en la citada ciudad Norteamericana”.
Recordó que el reciente hecho en Las Vegas, EEUU, en la que un solo hombre, provisto de armas automáticas, disparó a una multitud matando a 59, hiriendo a 500, un hecho que consternó la comunidad global, cuya acción movilizó todo el aparato investigativo de la nación más poderosa del mundo, consideró que ese hecho queda corto al asesinato de mujeres en el país.
“Si promediamos las muertes de mujeres dominicanas por sus parejas, novios y exparejas en unas cien por año estamos ante un grave problema de salud pública y de seguridad ciudadana en la República Dominicana”, dijo el profesional de la salud y de la conducta.
“Nuestra reacción no se siente y nos preparamos para el conteo del siguiente año, sin dar una respuesta de políticas públicas y de la sociedad civil para disminuir el riesgo de morir que tienen cada año las mujeres dominicanas, por un machismo salvaje que agrede la seguridad nacional”, observó.
Manifestó que el machismo salvaje actúa de manera automática frente a la infidelidad, amenaza de abandono y frente al abandono consumado, debido a que actúa movido por una cultura y costumbre, debido a una educación adquirida por un aprendizaje social “que debemos desarraigar desde la niñez”.
Propuso utilizar la escuela, iglesias y organizaciones comunitarias como aliadas e ideológicas para ir sacando de raíz ese comportamiento automático y violento del macho salvaje dominicano.
Dijo que “el machismo salvaje actúa automáticamente a tal grado que el propio “macho” se suicida en muchos casos, sugiriendo reflexionar frente a las estadísticas de homicidio/suicidio”, considerándolo como un fenómeno de irracionalidad extrema y un comportamiento primitivo de alguien que se yergue sobre la ley.
“No es posible controlar una pena de quien mata a su mujer y decide matarse a sí mismo. Una decisión suicida que demuestra arrepentimiento ante un hecho atroz que deja a hijos e hijas en la orfandad, además, llena de dolor y duelo a familiares, amigos y a la sociedad en general”, señaló.
Afirmó que los homicidios a la mujer con suicidio del hombre reflejan que las relaciones de pareja, en nuestro contexto cultural, son un factor de riesgo que amenaza la vida de la mujer dominicana y la del hombre mismo, “cuando el macho salvaje comete suicidio”.
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