viernes, 1 de febrero de 2019

Danilo, la carambola y la campaña sucia JJ Rendón

Juan Tomás Olivero
El discurso presentado en conferencia de prensa el pasado domingo 27 de enero por el sector del expresidente de la República, Leonel Fernández Reyna, no dejó duda alguna de que conocían al dedillo toda la maniobra puesta en marcha

Por Juan Tomás Olivero Al definirse como el estudio de la comprensión y la interpretación, la teoría filosófica hermenéutica contiene diversas contribuciones conceptuales y prácticas al ejercicio clínico del psicoanálisis transaccional político. A santo de qué este teoricismo para explicar una cosa tan simple como el continuismo, la perpetuidad sin límite reeleccionista y el comportamiento autoritario del danilismo, más su decisión, de construir una estructura compleja de maldad y perversidad que nos obliga a emburujarnos con lo absurdo como forma de vivir la angustia de lo inconcebible.
Para entender la estrategia de campaña o método de carambola de JJ Rendón, típica de la modalidad del billar francés sin bolsillo, hay necesariamente que hurgar en las razones ocultas del movimiento del Mingo en el juego y transpolar al plan fascista de la reelección esta lógica lúdica; para así, y de esta manera, conocer y entender las verdaderas razones ocultas de este plan Rendón-Danilo. ¿Qué buscaban los danilistas con la táctica política publicitaria de dejar filtrar su plan de campaña sucia, dejando saber de dónde, cómo se organizaría y de cuándo sería esta trama?
El discurso presentado en conferencia de prensa el pasado domingo 27 de enero por el sector del expresidente de la República, Leonel Fernández Reyna, no dejó duda alguna de que conocían al dedillo toda la maniobra puesta en marcha, incluyendo el día anunciado para el despliegue de la hipotética campaña sucia, armada y operada desde las entrañas del gobierno con la concurrencia y responsabilidad del propio presidente de la República, como parece ser la costumbre y nuevo paradigma en estos asuntos.
En las severas críticas de Juan Bosch con respecto al PRD y la forma en como sus dirigentes se relacionan con la cosa pública, decía: “Ellos manejan las cosas del Estado como si fuera una cosa personal”
A pesar de campañas y violencias reactivas, a pesar del acoso y la hostilidad contra Leonel Fernández, éste ha sostenido una postura firme de guardián de la constitución y defensor de la unidad del PLD a todo costo.  Los Culebras Blancas PACOREDO de palacio (OTAN-Danilo) preocupados por este fenómeno político logrado por el expresidente, han recurrido a la contratación del sicario-publicista JJ Rendón.
Gracias a la mente lascivosa de JJ Rondón, a su asesoría y diseño brutal; han forjado en esta nueva intentona reeleccionista una   estrategia persuasiva del vértigo al estilo del dios Pan de la mitología griega contra el sector Fernández Reyna, logrando, con mucha eficacia los efectos deseados de sembrar pánico de forma precipitada, al desencadenar una actuación   turbada e indignada, como ocurrió con la llamada rueda de prensa del pasado domingo. Perdiendo de vista, los seguidores del expresidente, las fortalezas que han sostenido y   granjeado el posicionamiento que tiene actualmente el expresidente Fernández Reyna a lo interior y exterior del PLD.   Sembraron pánico con la filtración intencionada de campaña sucia y vinculación con el narco tráfico, exhibiendo a JJ Rendón el publicista mensajero del Chapo Guzmán como forma de turbación para colocar con una estrategia de pertinentización mediática en un plano de defensiva y ostracismo mediático al expresidente Fernández Reyna en los días previos, durante y posteriores a la celebración del conciliábulo de la Internacionalista Socialista de Miguel, Danilo e Hipólito.
La postura precipitada asumida en la rueda de prensa por el sector Fernández facilitó la estrategia y plan Rendón-Danilo de arrebatar con su discurso en el acto de la Internacional Socialistas las tres banderas fundamentales de la figura que marcan de manera relevante el liderazgo del expresidente Fernández: reconocimiento Internacional, defensa de la Unidad del PLD y Guardian incondicional de la Constitución.  Pretendieron, sin lograrlo, con relación a estos rasgos, valores y atributos del expresidente, ser arrebatados en el marco de la celebración de adhesión a los dictámenes de Washington de esta mal llamada reunión de Partidos de la Internacional Socialista.
Además, los danilista como política de Estado plantearon en sentido de   oposición a la postura enarbolada por el presidente Fernández en la comisión de UNASUR y otros órganos de mediación regionales  la  solución pacífica y política en Venezuela;  de forma intempestiva, se lanza  un nuevo rumbo y manejo de la crisis de Venezuela, con una  versión   inaudita en materia de política internacional de lacayismo y servidumbre internacional del presidente Danilo Medina Sánchez, contraviniendo con esta claudicada  postura  internacional  los principios fundacionales del Partido de la Liberación Dominicana y legado de su fundador, Juan Bosch.
En las severas críticas de Juan Bosch con respecto al PRD y la forma en como sus dirigentes se relacionan con la cosa pública, decía: “Ellos manejan las cosas del Estado como si fuera una cosa personal”.  Eso mismo han significado Danilo y Miguel, creen que pueden despachar la tradición de dignidad y solidaridad de las Relaciones Internacionales de República Dominicana con los pueblos del mundo de forma personal, avergonzándonos a todos.
En el Derecho Internacional se reserva a cada Estado, país, Gobierno u Estado el reconocimiento a sus pares, tomando como reglas los tres elementos o principios admitidos en la comunidad internacional como constitutivo: un territorio, población y Gobierno Autónomo; según la filosofía política en el derecho internacional estos elementos deben concurrir de forma conexa, concomitante e inseparable para hacer gozar de legitimidad reconocible al sujeto jurídico demandante. El gobierno inventado y dependiente de los Estados Unidos de América en Venezuela, no puede hacer uso y ejercicio de uno solo de estos tres elementos de legitimidad en su subjetividad jurídica ante la comunidad Internacional. ¿De que sirven las reglas que regulan las relaciones internacionales y garantizan la armonización de una convivencia en paz y de respeto a la soberanía de cada nación: si un individuo, país o grupo de países hace lo que le venga en ganas?

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