César Cedeño: «nos llevamos muy bien con el CAC»

Aguacatico, Tamayo.- Ante el pedido de la Articulación Nacional Campesina (ANC) y sectores de la Región Enriquillo para que el gobierno rescinda el contrato del ingenio Barahona, el director ejecutivo del Consejo Estatal del Azúcar CEA), dijo que se «llevan muy bien» con el Consorcio Azucarero Central (CAC).

El pedido para rescindir el contrato que hace poco más de dos décadas se firmó con empresarios locales y extranjeros, tiene el propósito de que esos terrenos, actualmente sembrados de caña, se cultiven productos agrícolas.

Cedeño, recordó que se trata de un contrato que beneficia a las partes, por lo que hasta el momento no hay problemas.

«Nos llevamos muy bien con el CAC, poniendo las cosas sobre la mesa. Miren ahí, el proyecto agrario Aguacatico, que estaba abandonado desde hace muchos años, ya lo tenemos contribuyendo con el desarrollo del país con la producción de caña de azúcar», afirmó.

Valora recuperación terrenos

En otro orden el director ejecutivo del Consejo Estatal del Azúcar, valoró que en los primeros cien días del gobierno de Luis Abinader, se recuperara una gran cantidad de terrenos ocupados ilegalmente en todo el país y que el CEA seguirá recuperando bienes y patrimonios, por disposición del presidente Luis Abinader.

Expresó que este proceso se desarrolla sin mayores preámbulos, siempre cumpliendo con lo establecido por la ley.

El pasado vienes siendo las 5:00 am el ruido y los gritos despertaron residentes de los bateyes 5 y 6, zona cañera del ingenio Barahona, cuando porque el CAC destruyó viviendas y un centro de diversión.

«Nadie tiene que sentirse mal por la recuperación de terrenos que llevamos a cabo, por el contrario, yo creo que todos tenemos el deber de proteger los intereses del Estado, porque son de todos nosotros», afirmó.

Cedeño, fue abordado por periodistas en el acto en que el Consorcio Azucarero Central (CAC), arrendatario del ingenio Barahona, pagó RD$11,000,000 a 368 parceleros del proyecto agrario “Aguacatico”, ubicado en Tamayo, provincia Bahoruco, por el arrendamiento de sus tierras para la siembra de caña de azúcar.