El ministro de Educación, Ángel Hernández, afirmó que la participación activa de la familia y la comunidad en el proceso educativo que se desarrolla en las aulas es fundamental para garantizar el aprendizaje de los niños en la primera etapa de escolaridad y superar las limitaciones actuales del sistema educativo.

El funcionario habló en el Seminario Nacional de Familias 2022, organizado por el Viceministerio de Descentralización y Participación Comunitaria del Ministerio de Educación de la República Dominicana (Minerd), que este lunes y mañana martes analizará y brindará estrategias para apoyar la educación integral desde el hogar.

“Si algo es importante en la sociedad de hoy es la familia. Y hay que fortalecerla. Hay que fortalecer la familia en su rol educativo. No hay forma alguna de mejorar la escuela si la familia no se involucra”, aseguró Ángel Hernández.

Dijo que con el fortalecimiento del vínculo entre la escuela y la familia, “con toda seguridad lograremos la meta de que cada niño y cada ciudadano sea mejor". "Es tiempo de que las familias sean los actores principales de este proceso, no solamente los observadores”, subrayó el ministro.

La primera dama

La directora del Gabinete Infantil y también primera dama de la República, Raquel Arbaje, también señaló que fortalecer el rol de la familia y conmemorar su unidad debe hacerse “cada segundo, cada microsegundo”. Instó a los participantes del seminario a ser multiplicadores de los conocimientos que se exponen durante la jornada.

Resaltó que la labor de crianza integral, responsabilidad de la familia, es fundamental para tener mejores ciudadanos. “Criar no es lo mismo que educar”, aseguró la primera dama, quien afirmó que, a pesar de los desafíos, la familia dominicana se ha mantenido.

En busca del compromiso de las familias

Mientras que la viceministra de Descentralización y Participación del Minerd, Ligia Pérez, sostuvo que se hace cada vez más necesaria la participación de la familia y la comunidad en las escuelas. 

Pérez subrayó que la misma Ley General de Educación 66-97 establece, incluso, que la familia es la primera responsable de la educación moral y ciudadana de sus hijos. En los principios del artículo 4, literal 6, así como los artículos 20 y 58 de esa normativa, indican que la familia es la base para la educación de sus hijos