Según el director del Intrant, Milton Morrison, la idea será revisada minuciosamente para determinar su viabilidad en términos de seguridad ciudadana. Morrison expresó su compromiso de tomar acciones efectivas si esta medida garantiza mayores niveles de protección. Para él, “no existen motivos para desplazarse en motocicletas durante la madrugada”, apuntando a que su uso en esas horas ha sido asociado con un incremento en actividades delictivas.
Además de la restricción, el Intrant y otros organismos han sugerido complementar la medida con operativos aleatorios, controles de documentos y antecedentes, y la implementación de tecnología de vigilancia, como cámaras y sistemas de reconocimiento facial y de placas. Estos recursos podrían ser decisivos en la identificación rápida de motociclistas en actitud sospechosa o involucrados en actos delictivos.
El impacto de la delincuencia relacionada con motocicletas ha sido alarmante: un reciente informe de la Policía Nacional revela que en un 67.36% de los casos de asalto reportados en el 2024, las motocicletas han estado involucradas. Esta cifra refuerza la necesidad de tomar acciones contundentes para reducir la inseguridad en las calles.
Esta es la segunda vez que el Intrant aborda públicamente la posible prohibición nocturna. En 2022, el entonces director Hugo Bera ya había mencionado la idea en una mesa de seguridad, aunque no se concretó. Sin embargo, los índices actuales de criminalidad han renovado el debate, y la medida podría estar más cerca de convertirse en una realidad. ¿Es esta la solución que devolverá la tranquilidad a los ciudadanos dominicanos?
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