El gobierno, en cabeza del presidente Juan Manuel Santos, firmó ayer decreto que establece cada 4 de julio como el Día Nacional de la Libertad Religiosa y de Culto en Colombia.
El acto se llevó a cabo en la Casa de Nariño y contó con la presencia de 115 líderes de las comunidades religiosas: católicos, cristianos, protestantes, judíos, musulmanes, bahai's y voceros de algunas comunidades internacionales.
“Creo que es el decreto más corto que he podido firmar en seis años de gobierno”, dijo el jefe de Estado quien explicó que la redacción del documento estuvo a cargo del Ministerio del Interior y el Comité Interreligioso Consultivo.
Durante el acto, el Cardenal Rubén Salazar, Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia afirmó que el decreto le permite al país avanzar “por estos caminos de la libertad religiosa, del respeto profundo a la conciencia, del respeto profundo a todos y cada uno de los derechos humanos”.
También estuvieron presentes representantes de organizaciones sociales internacionales como Open Doors, el Consejo Mundial de Iglesias. Además de acompañar la firma del documento, los líderes de las diferentes religiones anunciaron que trabajarán conjuntamente para acompañar el anhelo de paz que tiene el país.
Santos, igualmente, enfatizó en que la Carta Magna que rige en Colombia y que hoy cumplió 25 años de promulgada, fue la que elevó a rango constitucional la libertad de cultos.
“En ustedes se reúne el país que queremos: uno en el que quepamos todos, donde todos cabemos: Uno en el que el pensamiento diferente nos enriquezca en vez de dividirnos, de enfrentarnos”, apostilló el presidente.
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