TOMADO DE DIARIO LIBRE Editorial
El Partido Revolucionario Moderno está dejando escapar extraordinarias oportunidades de posicionarse como una alternativa de oposición por su política de no aceptar sus logros.
Su participación en el Consejo Nacional de la Magistratura fue extraordinaria al lograr sus objetivos de impedir que repitieran jueces en las Altas Cortes, pero en vez de cantar sus logros, se concentra en que algunos de los elegidos son partidarios del partido de gobierno.
Del mismo modo pretende presentarse ante la opinión pública como que no forma parte de los organismos que ayuda a formar, cuando la estrategia correcta es garantizar una presencia dentro de todos los organismos del Estado como líder de la oposición.
A menos que el partido pretenda “irse al monte”, lo que a ojos vista no puede hacer, su mejor estrategia es echar el pleito desde adentro, informándose de lo que se cuece, cuestionando las prácticas non sanctas, en una palabra, haciendo oposición y mostrándose como una alternativa.
Una estrategia clara de oposición es lo que demanda la situación actual
No hay comentarios:
Publicar un comentario